30 de septiembre de 2011

el flan de mamá

Un flan sencillo; huevos, azúcar y leche.
¿Qué tiene de especial?



Es un flan horneado sin el método baño maría, y era, sin ninguna duda, mi postre favorito de niña, y una de las especialidades de mi madre.
"El flan con agujeritos", jugoso, caramelizado, sabroso y alimenticio.
Imposible olvidar los flanes de mi madre, con una docena de huevos y dos litros de leche, enormes, brillantes, incitadores.
Mi pobre madre debía esconderlo para que no me lo tomase entero y peligrase mi inexistente colesterol infantil.





El reto que nos propone Film&Food para Septiembre tiene que ver con nuestros primeros recuerdos gastronómicos, esos que deseábamos comer siempre y que rogábamos que nos preparasen.
Y en mi caso se trataba del flan con agujeritos, el que yo creía que era mágico por tan distinto a los demás, tan alejado en textura del flan liso.
Y, cómo nos proponen, se lo dedico a la niña rubia que fui y dejé de ser.



Para su elaboracion necesitamos (4 flanes),

- 3 huevos.
- 100 gr de azúcar.
- Un trozo de piel de limón recién cortado.
- 2 vasos de leche (de los de agua pequeños).
- 50 gr de azúcar y unas gotas de limón para el caramelo.

Calentar la leche con la piel de limón sin dejar que hierva. Dejar templar y retirar la piel.
Batir con el azúcar y los huevos. Reservar.
Preparar un caramelo ligero poniendo al fuego los 50 gr de azúcar con el limón, caramelizar el fondo de de las flaneras y, cuando haya enfriado, verter la crema y hornear directamente a 180º hasta que hayan cuajado, para flanes pequeños unos 30 mn.
Dejar enfriar y servir acompañado con nata montada, helado o en su versión más exquisita, solo.





29 de septiembre de 2011

pan bicolor

Un pan de molde con muy poco azúcar, perfectamente combinable con un buen embutido o quesos fuertes.
El toque del cacao ofrece un contraste a la masa blanca no sólo en aspecto y color, también en ligeros matices de sabor que lo convierten en un pan muy interesante.



Su forma perfecta  se debe al molde con tapa. Lo adquirí en El Amasadero y es extraordinariamente cómodo. Sabemos que está listo para ser horneado cuando la masa ha alcanzado la tapa en el segundo levado, favorece una cocción uniforme y las masas no se desgarran o deforman.


Hace tiempo había visto esta receta en El gato goloso, y estaba esperando el momento idóneo para prepararla, en un día de enorme calor en que el horno no ayudó a mejorar la sensación de insoportable bochorno.
Me encanta el blog de Mavele, es una gran fotógrafa y disfruto enormemente con sus textos y sus recetas.




Para su elaboración necesitamos (molde de 1 kg),

- 600 gr de harina panificable.
- 380 gr de agua templada.
- 8 gr de levadura de panadería seca.
- 10 gr de sal.
- 25 gr de mantequilla ablandada.
- 12 gr de leche en polvo.
- 20 gr de azúcar.
- 25 gr de cacao en polvo sin azúcar.
- 30 gr de azúcar glass.

Mezclar en la amasadora todos los ingredientes menos el cacao y el azúcar glass.
Cuando hayamos conseguido una masa lisa y manejable, dividirla en dos partes del mismo peso y mezclar una de ellas con el cacao y el azúcar glass.
Dejar levar en recipientes separados hasta que doblen el volumen.
Estirar cada porción de masa en forma rectangular. Colocar la de cacao encima y enrollar presionando bien los extremos para sellarlos.
Meter el pan en el molde engrasado (si es molde con tapa engrasar ésta última también) y dejar levar hasta que la masa haya alcanzado la tapa e incluso se salga por los pequeños agujeros de la parte superior.
Hornear a 180º en horno precalentado más o menos una hora.
Dejar enfriar sobre una rejilla y cubierto con un paño húmedo.



28 de septiembre de 2011

¿príncipe o rana?

¿A quién no le ha pasado que el príncipe le saliera rana? al menos una vez en la vida.
Sin embargo, no conozco a nadie a quién le haya ocurrido lo contrario.



Al Minichef le gusta ir a un parque que tenemos cerca de casa. En sus estanques con lotos y palos de bambú, muy al estilo zen, viven cientos, miles de ranas.
Ha ido especializándose durante este verano, ahora lleva un truel y las caza de cuatro en cuatro.
Generalmente las conserva unas horas y, tras idiotizarlas con tanto toqueteo, las desafortunadas ranas vuelven a la charca cargadas de traumas. Físicos y psicológicos.



Hace un tiempo escuché (lamentablemente escuchamos de su boca demasiadas cosas parecidas) a Bibiana Aído encabezando una campaña para revisar los cuentos clásicos; la Cenicienta pasaria a ser una gossip girl que tendría al príncipe limpiando los cristales con un delantal a rayas, la malvada madrastra de Blancanieves debería preocuparse más de su cociente intelectual y menos de las cremas nutritivas y el bótox y la falda la llevaría Mickey, no Minnie.
No bromeo. Es estrictamente cierto.
Algún alma caritativa debió comprarle una bolsa de caramelos y entre palote y chicle de melón se olvidó de la que sólo fue una más de sus ideas absurdas.
Sin embargo, del príncipe y la rana no dijo ni mú.
Ninguna de las infortunadas capturas del Minichef que han pasado la noche en una caja de plástico en la cocina cantó a la luna ni me puso ojitos, pero para la próxima prometo probar...
Galletas de vainilla con glasa sabor mandarina.
Para arrancarles la cabeza de un beso.



27 de septiembre de 2011

tramezzino ricco

El pan de tramezzino es un pan de molde extraordinariamente blanco y suave, sin corteza, cortado en rebanadas el doble de largas que una rebanada de pan de molde normal y que constituye la base del sandwich italiano por excelencia.



El orígen de este sandwich se encuentra en el Caffé Mulassano del Piazza Castello en Turín, dónde fue creado como una alternativa al sandwich inglés típico del high tea.
Actualmente, la oferta de tramezzini es tan variada que se ofertan alrededor de cuarenta variedades.


La palabra tramezzino fue creada por el escritor Gabriele D´Annunzio como un sustituto de la palabra sandwich más sencilla de pronunciar para un italiano y sin llegar a ser un neologismo.


Resulta delicioso ligeramente tostado, pero fresco mantiene la forma sin deformarse.
La textura esponjosa absorbe los sabores y admite cualquier relleno que se nos pueda ocurrir.
Italian Delicat nos ofrece la posibilidad de adquirir este delicioso pan. Es tan sencillo como entrar en su página y comprar con un clic.
En este mundo acostumbrado a las compras on line, aplicamos las mismas cotas de exigencia que en la compra física, pero Italian Delicat nos lo pone fácil; ¿a quién no le ha ocurrido el tener que volver a la página en la que estaba comprando tras seleccionar un artículo, con la consiguiente pérdida de tiempo que en ocasiones lleva a cancelar la compra? Italian Delicat nos ofrece un modo sencillo y claro de hacer nuestras compras, con una web cuidada al detalle y pensada para la total satisfacción del cliente, desde el primer minuto hasta el momento en que la recibimos en casa.

Para su elaboración necesitamos,

- 3 rebanadas de tramezzino Roberto.
- 4 filetes de pechuga de pollo a la plancha.
- Mayonesa ligera.
- Un tomate cortado en lonchas finas.
- Cuatro lonchas de mozarella.
- Unas hojas de rúcula.

Tostar el pan en el horno durante unos minutos a máxima potencia. Utilizar tres lonchas para cada tramezzino. Untar la primera rebanada con mayonesa y disponer sobre ella tomate y rúcula. Colocar la segunda rebanada y untar de nuevo con la salsa, disponer el queso, tomate y el pollo. Tapar y cortar al gusto.
Resulta ideal como cena rápida acompañado por una cerveza rubia Menabrea, igualmente disponible en Italian Delicat. Una cerveza ligera y sabrosa que maridará a la perfección con el tramezzino.






26 de septiembre de 2011

magdalenas de té verde

El té matcha está de moda.
Lo vemos interviniendo en mejorar el aspecto y sabor de panes, bizcochos, helados y todo tipo de preparaciones dulces.
Casi parece haberse olvidado su principal uso como infusión.
Sobre sus propiedades y modo de empleo he hablado largamente aquí.



No se encuentra con facilidad. Podemos pedirlo a algunas tiendas on line o solicitarlo en establecimientos especializados.
Su maravilloso color es su rasgo más característico.
A pesar del auge que está experimentando, hace unos días preguntaba a un gran entendido y distribuidor de té por el matcha;  extrañamente jamás lo había escuchado mencionar. Sé que desde nuestra conversación ha remediado esta pequeña laguna en sus vastos conocimientos, y como compensación me obsequió con un maravilloso té Darjeeling verde de la mayor calidad.
Lo molí y me quedé con la parte más fina, aquella que obtiene la consistencia del talco.



Efectivamente, el té verde es más oscuro y su color no tiñe las masas como el té matcha, pero el sabor, más sutil, resulta delicioso. Un sabor que he percibido como adulto y leve, las magdalenas se convierten con su adición en un bocado gourmet al alcance de cualquiera.




Para su elaboración necesitamos,

- 2 huevos grandes.
- 120 gr de harina todo uso.
- 100 gr de azúcar glass.
- 100 gr de aceite vegetal.
- 3 gr de té verde molido.
- Una cucharadita de levadura.

Batir bien los huevos, el azúcar y el aceite. Tamizar los ingredientes secos y añadirlos a la mezcla.
Verter sobre cápsulas encajadas en un molde rígido de muffin (para evitar que se deformen), hornear a 200º en horno precalentado unos 20 mn.
Con mis cápsulas de muffin grande salen 4, con cápsulas de magdalena obtendremos entre 6 y 8.
Dejar enfriar sobre una rejilla.







24 de septiembre de 2011

las galletas de monsieur eiffel

La torre más famosa del mundo, con permiso de la de Pisa y la de Babel.
El modo más realista de comerse un pedazo del París más emblemático, con mantequilla francesa y sabor a limón.



Construida para la Exposición Universal de 1889, en conmemoración de los primeros 100 años tras la Revolución Francesa, Gustave Eiffel y su compañía aceptaron el encargo en el mes de Marzo de 1887, terminándola dos años después, en el tiempo estipulado.
En cuanto fue presentada a la población comenzaron las demoledoras críticas, el "gigante de hierro", como se conocía entonces, resultó a sus contemporáneos un elemento disorsionador en el paisaje romántico de la ciudad que intentaba competir con los emblemas parisinos por excelencia; el Louvre, Arco de Triunfo y, fundamentalmente, la Catedral de Notre Dame.



Si hablamos de características técnicas, la torre es una enorme estructura metálica que pesa unas 10.000 toneladas y su altura, originalmente de 300 metros, es actualmente de 324 metros, incluida la antena de radio y televisión que fue añadida mucho después. Trabajaron en ella unos 200 obreros que unieron más de 18.000 piezas de hierro con 2 millones y medio de bulones. Los cimientos alcanzan los 30 metros de profundidad, debido a la proximidad con el río y la naturaleza del subsuelo.
En el primer nivel, a 57 metros de altura, funcionan una oficina de correos, desde donde se pueden enviar postales con la estampilla especial "Paris Tour Eiffel", el restaurante "Altitude 95", una tienda de recuerdos, la sala de recepciones y conferencias "Gustave Eiffel", el Cineiffel, exposiciones con fotos de la torre, y porsupuesto la galería desde la cual se pueden tomar fotos panorámicas de París.
El segundo nivel se encuentra a 115 metros del suelo y desde allí parte el ascensor que lleva al tercer nivel. Hay algunas tiendas de recuerdos, el restaurante Julio Verne y sobre todo, las panorámicas de la ciudad que son espectaculares.
A 276 metros, después de subir 160 metros en el ascensor, se alcanza el tercer nivel, donde las vistas son absolutamente extraordinarias. En este nivel hay una recreación del lugar de trabajo de Gustave Eiffel, con figuras de cera de Eiffel y su hija Claire recibiendo al inventor Thomas Edison, así como de Gustave Eiffel y sus dos ingenieros, Maurice Koechlin y Emile Nouguier



Cuando se autorizó la construcción de la torre, Gustave Eiffel debía emprender el proyecto con sus propios fondos y el gobierno de la ciudad le permitiría la explotación de la torre durante el término de veinte años, transcurridos los cuales la torre pasaría a formar parte del patrimonio de París. La obra fue un éxito el primer año, pero los siguientes no fueron mejores, ni siquiera iguales al primero.
El destino de la torre al cabo de veinte años parecía no ser otro que la destrucción. Fue por eso que Eiffel hizo hincapié en las grandes ventajas científicas que una construcción de este tipo podía aportar (hasta la construcción del Chrysler Building en 1930 la torre era el edificio más alto del mundo) e hizo instalar una estación meteorológica en la cima y, más adelante, una antena telegráfica, cuyos beneficios quedaron altamente comprobados a nivel militar. Así, Eiffel salvó su torre. A partir de 1921 se comenzaron a emitir programas radiales y con el tiempo llegó la televisión.


Y así, la torre de Monsieur Eiffel se ha convertido en el símbolo de Francia y, para muchos, de Europa.
Para todos los amantes del arte y la arquitectura estas deliciosas galletas de vainilla con glasa saborizada con limón.



22 de septiembre de 2011

saltimbanquis

Pan.
El alimento básico de la humanidad desde la Prehistoria.
Tan sencillo como aquellas primeras masas de granos groseramente molidos y ligeramente humedecidos puestas a secar sobre piedras calientes.
Tan, tan sencillo, que hasta mi querida amiga Adriana se ha animado a probarlo, y parece que se ha enganchado.
Pan sabroso, tostado, fragante.
Sano, casero. Delicioso.



Receta para el pan en sistema directo de Xavier Barriga. Mezclar, amasar, cortar, pesar, formar, levar y hornear.
Ideales para bocadillos, con el sabor del pan de toda la vida.
Conseguir su flexible forma carece totalmente de dificultad, y con ello añadimos un ingrediente extra al pan.



Para su elaboración necesitamos,

- 500 gr de harina de fuerza.
- 10 gr de sal fina.
- 300 ml de agua templada.
- 2 gr de levadura seca o medio cubo de levadura fresca.

Si utilizamos levadura fresca, disolverla en el agua y añadir después el resto de ingredientes. Amasar.
Con levadura seca seguiremos el orden; agua, harina y, formando dos huecos con los dedos, verteremos en uno la levadura y en otro la sal.
En amasadora, mezclaremos los ingredientes con el gancho durante unos 8 mn, a mano, amasar hasta obtener una masa elástica y que no se pegue a las manos, unos 12-15 mn.
Pincelar ligeramente la base de un bowl con aceite y espolvorear con harina, dejar reposar la masa tapada durante unos 30 mn.
Cortar porciones y pesarlas, del tamaño deseado (unos 100 gr). Dejarlas sobre la encimera o la mesa de trabajo cubiertas con un paño húmedo durante 15 mn.
Dar forma de barritas a los trozos procurando hacerlas terminar en punta. Espolvorearlas con harina con un colador fino para que queden uniformemente cubiertas, y, tapándolas con el paño húmedo, dejar reposar 90 mn.
Precalentar el horno a 220º e introducir un recipiente con agua en la parte baja. Pasar las barras a la bandeja del horno, girarlas con las manos en forma de S y darles un corte limpio con un cutter o un chuchillo muy afilado.
Hornear durante 30 mn aproximadamente.




21 de septiembre de 2011

helado de frambuesa

En una feria de productos ecológicos celebrada en el Concejo de Llanera (localidad cercana a Oviedo), adquirí una hermosa caja de frambuesas ecológicas con las que decidí elaborar un helado cien por cien natural.
La fruta, jugosa, madura y deliciosa, le aportó una intensidad de sabor y color muy difícil de conseguir con frutos de invernadero.



La Agricultura Ecológica está regulada legalmente en España desde 1989.
Hay que decir que las leyendas ¨Bio, Dietético, Natural, o Sin Conservantes¨ nada tienen que ver con el método de producción ecológico y, por tanto, no debemos confundir los términos.



Las técnicas básicas de este tipo de cultivos incluyen,
- Rotación de cultivos, que preservan la biodiversidad y fertilidad del suelo.
- Asociaciones de cultivos de dos o más especies diferentes que se beneficien entre ellas.
- Situados en los márgenes de las zonas de cultivo, contribuyen a evitar las incidencias de las inclemencias climáticas y favorecen la polinización de los insectos.
- Se integra la agricultura y la ganadería dado que los animales prporcionan el sustento orgánico a los suelos.

Según los defensores de la agricultura ecológica, los productos contienen más nutrientes que los convencionales, se evita el uso de pesticidas no aptos o, al menos, no beneficiosos para consumo humano, se genera mayor mano de obra y se disminuye la contaminación de las aguas subterráneas y los suelos.
Cierto es que el precio suele ser más elevado, aquí el consumidor decide qué tipo de alimentación elige para su familia teniendo en cuenta que, a pesar de que el aspecto de estos productos no consigue la perfección de los no ecológicos y que su vida útil es más corta, estaremos consumiendo alimentos del mismo modo que se ha venido haciendo durante siglos.




Mis frambuesas son de El Camponeco, granja situada en Los Campos, Miravalles, Villaviciosa, la cual nos ofrece la posibilidad de hacer nuestra compra a través de su web http://www.elcamponeco.com/, y recibirla cómodamente en nuestro domicilio.
Los moldes son de la empresa italiana Silikomart, igualmente disponibles en su web.



Para su elaboración necesitamos,

- 250 gr de frambuesas de cultivo ecológico.
- Un brick pequeño de nata líquida grasa (200 gr de al menos 35% de materia grasa).
- 100 gr de leche entera.
- 150 gr de azúcar.
- 2 cucharadas de azúcar invertido (receta aquí).

Mezclar todos los ingredientes con la batidora o robot. Si se desea eliminar las pequeñas pepitas de la fruta, batir primero las frambuesas y colarlas después.
Verter la mezcla en los moldes y dejarla en el frío al menos durante 5 horas.




20 de septiembre de 2011

bizcochón de gofio

Mi primera y única aproximación al gofio ocurrió hace años, durante unas vacaciones con mis padres en Tenerife.
Recuerdo que lo sirvieron como acompañamiento de un pescado, con un aspecto muy parecido a la masa cruda de pan, para ser tomado a cucharadas.
Ha sido toda una revelación para mí saber que con esta deliciosa harina pueden elaborarse dulces como magdalenas o bizcochos, incluso helados.



Unos días antes de las vacaciones, Isabel tuvo el detalle de enviarme un paquete de frangollo que estoy deseando probar, y uno de gofio de mezcla con maíz, millo como se denomina en Canarias, con el que he elaborado este bizcocho.



El gofio es un alimento prehispánico de orígen bereber, consumido por los aborígenes canarios, o guanches, como parte primordial de su dieta.
Consumido anteriormente a la llegada de los conquistadores europeos, se conocía como ahoren en Tenerife y como gofio en Lanzarote y Gran Canaria, nombre con el que ha llegado hasta nuestros días.
Se trata de una mezcla de granos tostados y molidos a la piedra a los que se les añade sal.
En orígen se elaboraba de cebada, trigo y raíz de helecho, tras la conquista de América se incorpora el trigo o millo o el centeno.
Durante las épocas de hambrunas, como por ejemplo la Guerra Civil Española, fue sustento fundamental para el pueblo dado su alto aporte calórico y se conservaba largo tiempo si se protegía de la humedad.




Posee un color oscuro y un aroma que recuerda ligeramente al café. Mejora el sabor de las masas dulces convirtiendo un bizcocho de desayuno en un postre delicioso.


Para su elaboración necesitamos,

- 3 huevos.
- Un yogur natural.
- Un vaso del yogur de gofio de mezcla.
- Un vaso del yogur de harina todo uso.
- 2 vasos del yogur de azúcar moreno.
- Un vaso del yogur de aceite vegetal.
- Un sobre de levadura.
- Ralladura y zumo de un limón.
- Una cucharadita de canela.
- 75 gr de almendras molidas.
- Azúcar glass y pasas para decorar (opcional).

Batir los huevos con el azúcar y aceite hasta que espumen. Añadir el gofio y mezclar bien para que no queden grumos. Incorporar la ralladura y el zumo y, finalmente, la harina tamizada con la canela, almendra y levadura.
Yo lo he horneado en FussionCook, menú horno, válvula abierta,1 hora y 15 mn, en horno convencional precalentar el horno a 180º y comprobar con el Cake Tester que la masa ha subido y se ha cocido uniformemente.
Espolvorear con azúcar glass y decorar al gusto.







19 de septiembre de 2011

pan de tomate, albahaca y parmesano

Un pan muy italiano que no solemos encontrar en Italia.
En su elaboración introduce tres de los grandes emblemas de la gastronomía italiana; el parmigiano reggiano, los tomates napolitanos y la albahaca.



El tono rojizo de la miga y la corteza le viene dado por el tomate. Lo ideal es elaborar una salsa con un buen tomate de San Marzano o utilizar un concentrado de tomate de calidad. En mi caso uso siempre la marca Mutti, unos tubos de más o menos cien gramos fabricados en Parma. Muy recomendables también para enriquecer las salsas si no disponemos de tomates italianos.



Se trata de un pan que no necesita adiciones de ningún tipo, aunque puede tostarse y untarse con quesos o acompañarse de un buen embutido.
El modo de elaboración es extremadamente sencillo. Se unen todos los ingredientes y se amasa hasta obtener una consistencia elástica. Tras respetar los períodos de levado y cocción obtendremos un pan con entidad propia, ideal para tomar con un buen aceite como el siciliano Planeta.


Un aceite vírgen extra producido por la empresa Planeta, productor de vinos de altísima calidad. Utilizan aceitunas Nocellara, recogidas a mano quince días antes de lo habitual.
Es un aceite que recomiendo encarecidamente, con un sabor intenso y afrutado y un color y un aroma que justifica el apodo de Oro de Sicilia con que se conoce al aceite de la isla.
Italian Delicat nos lo ofrece en dos tamaños, 250 ml y 500 ml, a un precio muy ajustado que podemos tener en nuestras casas entre 24 y 48 horas.
Irresistible como acompañamiento de ensaladas o sobre un buen pan como en este caso.

Para su elaboración necesitamos,

- 600 gr de harina de fuerza blanca.
- 8 gr de levadura seca de panadería.
- 240 gr de agua tibia.
- 20 gr de aceite de oliva Planeta.
- Una cucharadita de sal.
- 100 gr de parmesano recién rallado.
- Una cucharada colmada de concentrado de tomate.
- Un puñado de hojas de albahaca fresca cortadas.

Colocar los ingredientes en el orden indicado en la panificadora o el vaso de KitchenAid. Amasar a velocidad media hasta que la masa se haya unido y vuelto elástica, entre 8 y 10 mn.
Sacar del vaso y darle la forma deseada, introducir en un molde para pan y dejar levar el doble de su volumen.
Precalentar el horno a 200º, hornear durante 50 mn o hasta que al golpear suene a hueco.
Dejar enfriar sobre una rejilla y servir cortado en rodajas y acompañado de aceite vírgen extra Planeta.




17 de septiembre de 2011

la ensalada de frutas barroca

Un postre basado en el óleo Natura morta con cocomero e fichi (Naturaleza muerta con sandía e higos) del pintor napolitano Luca Forte.


Luca Forte, pintor napolitano entre el 1615 y 1670. Uno de los grandes desconocidos del Barroco italiano, existen pocas pruebas documentales que nos acerquen a su vida y obra.
Se especializó en bodegones a menudo ricos en frutas en lugar de flores.
Otros pintores de naturaleza muerta en su época en Nápoles fueron; Paolo Porpora, Giovanni Battista Ruopolo y Pietro Paolo Bonzi.



El óleo, en colección privada, se configura en torno al contraste entre el fondo oscuro y la fruta en primer plano, golpeada por una luz rasante que pone de manifiesto formas y colores.
Alrededor de la sandía abierta que ocupa el espacio central, se organizan con alternancia y hábilmente el resto de los elementos; frutas apiñadas en grupos como deseando reafirmar su presencia frente al poderoso disco brillante de la sandía como protagonista de la obra.
Forte contrasta el rojo y el amarillo con la transparencia del aire marrón que envuelve los elementos.
Fragancias y sabores parecen fluir de cada uno de ellos de forma abrumadora; higos, uvas y melocotones turgentes, velados por una húmeda pátina muy natural.
La fuerte influencia de Caravaggio, identifica la belleza con la verdad y el realismo.

Según un crítico de arte italiano, como se recoge en una biografía de pintores de 1742, sólo un siglo después de la muerte de Forte " Era pobre en la invención y composición, por lo que sus cuadros no encadenan planos y todo se desarrolla en una línea, un plano detrás del otro de modo lineal".
Esta cita despectiva no parece reconocer y apreciar el verdadero enfoque innovador del artista.
Expertos actuales en su obra comentan cómo se trata del primer pintor que compone naturalezas muertas con fondo de paisaje en sustitución de los motivos oscuros y sencillos habituales en el 1600 italiano. Su uso de la sombra y el color para mostrar con precisión los elementos también ha recibido elogios modernos.
Aunque su carrera está prácticamente indocumentada, de una carta de Antonio Ruffo di Messina, se desprende que tuvo éxito en su tiempo. Di Messina le envía 200 ducados, una fuerte cantidad en la época, por un bodegón de frutas diversas.
También hubo cuadros suyos en el Madrid de la época, en la colección de Juan Alfonso Enríquez de Cabrera, Virrey de Nápoles entre 1644 y 1646.
En subastas internacionales, sus obras sobrepasan actualmente los 50.000 euros.
Algunas de sus obras permanecen en manos privadas como la Getty Collection y en museos como la National Gallery de Londres.



Ya en el antiguo Egipto se decoraban las mesas con guirnaldas e higos. Este fruto (aunque más concretamente es una infruescencia y no un fruto) ha estado siempre presente en los banquetes de las mesas pudientes en forma de confituras, aderezado con hierbas y especias y aparece con frecuencia en los bodegones renacentistas y barrocos.
Su aspecto decadente y lujurioso encierra simbologías diversas y resulta delicioso y alimenticio en platos salados y como base de postres.

Para su elaboración necesitamos,

- 250 gr de higos negros pelados y cortados en trozos.
- 30 gr de agua.
- 30 gr de azúcar.
- Media sandía.
- Un racimo de uvas.
- 150 gr de azúcar.
- Tres cucharadas de agua.
- Hojas de menta.

Poner a cocer los higos con los 30 gr de agua y de azúcar. Calentar a fuego bajo y formar una crema que posteriormente se batirá y dejará enfriar.
Cortar la sandía al gusto.
Lavar las uvas y hacer un caramelo con los 150 gr de azúcar y las tres cucharadas de agua. Pasar las uvas por el caramelo y reservar.
Montar el plato poniendo en el fondo la crema de higos y, sobre ella, las flores de sandía y las uvas caramelizadas. Decorar con unas hojas de menta. Servir muy frío.





16 de septiembre de 2011

catcakes

O cupcats.
Magdalenas, frosting y galletas. Un desayuno completo.



Manu Catman está de cumpleaños y quiere que le regalemos recetas relacionadas con los gatos de sus entretelas.
Nuestro Manu (de Bego y mío), se lo merece todo y más, así que ahí va, gatitos asustados sobre hierba esponjosa y magdalenas de nata.



Galletas de vainilla con glasa saborizada con esencia de mantequilla, crema o frosting de vainilla y deliciosas magdalenas de nata.
No es una mezcla especialmente light, pero ya se sabe lo que dicen por ahí; "Uno al año no hace daño", aunque creo que no se refieren a los cupcakes...



Para su elaboración necesitamos,

Magdalenas,
- 170 gr de harina.
- 125 gr de azúcar.
- 125 gr de aceite vegetal.
- 50 ml de nata líquida para montar.
- 2 huevos grandes.
- 1 sobre de levadura.

Frosting,
- 160 gr de mantequilla en pomada.
- 360 gr de azúcar glass.
- Una cucharadita de esencia de vainilla.
- 2 cucharadas de leche.
- Unas gotas de colorante verde hoja Americolor.

Para las magdalenas batir bien las yemas con el azúcar hasta que blanqueen, añadir la nata y el aceite y mezclar bien. Incorporar la harina tamizada con la levadura y las claras a punto de nieve batiendo con cuidado para no perder el aire.
Yo he hecho la mezcla en Thermomix; poner la mariposa y batir 5 mn, 37º, velocidad 3.
Añadir la nata y el aceite y batir a velocidad 4, 15 segundos.
Quitar la mariposa e incorporar la harina y la levadura, batir hasta que la mezcla esté homogénea y dejar reposar entre 10 y 30 mn.
Precalentar el horno a 180º y verter la mezcla en cápsulas hasta la mitad de su capacidad. Hornear unos 20 mn y dejar enfriar.
Para el frosting se bate la mantequilla con el azúcar y la leche hasta que la mezcla comience a doblar el volumen. Añadir la vainilla y batir hasta que obtengamos el doble de mezcla. Incorporar el colorante y mezclar bien hasta que toda la crema haya conseguido el color deseado.
He utilizado la boquilla 1M de Wilton, al ser tan grande no necesita adaptador para la manga. Introducir la crema en la manga y dejar enfriar unos 15 mn en el frío.
Decorar las magdalenas y colocar sobre ellas las galletas.




Hasta el día 30 de septiembre tenéis tiempo para participar.