tarta de queso y crema de orujo

Ayer probé un nuevo queso que me ha encantado. En ocasiones preparo postres con queso y siempre echo de menos una textura más cremosa, mayor densidad.
Y ayer la encontré en un queso que os quiero recomendar, se trata de esta tarrina de 500 gr de queso natural.
Queso Quescrem, con una textura extraordinaria, densa y muy cremosa, ideal para postres.

Las tartas de queso admiten todo tipo de añadidos; frutas, mermeladas, licores, cremas, chocolates, y una combinación estrella resulta de la mezcla del queso fresco y la crema de orujo.
En caso de no disponer de ella, puede utilizarse Baileys, pero el sabor cambiará.

Mis preferidas siempre han sido las tartas de queso horneadas y con una fina capa inferior de galletas tostadas. Sabores sencillos pero con productos de buena calidad.

Me ha encantado igualmente el Mascarpone de Quescrem, una tarrina de medio kilo que nos solucionará más de una receta.

Para su elaboración necesitamos,

- Tres huevos medianos.
- 60 gr de Maicena.
- Una tarrina de medio kilo de queso natural Quescrem.
- Una cucharadita de pasta de vainilla.
- Un brick pequeño de nata para montar (200 gr)
- 80 gr de azúcar glass.
- 100 ml de crema de orujo o Baileys.
- 75 gr de mantequilla fundida y 150 gr de galleta tostada molida para la base.

Machacar las galletas y mezclar con la mantequilla fundida. Extender sobre el fondo de un molde desmontable engrasado.
Introducir en el horno a 180º unos 15 mn. sacar y reservar.
Mezclar todos los ingredientes de la tarta y batir muy bien hasta que no queden grumos.
Verter sobre la base de las galletas y hornear unos 50 mn en horno precalentado a 180º.
Cuando haya subido y dorado, pinchar con un cuchillo en el centro para comprobar que está hecha, debe estar firme al tacto.
sacar, dejar enfriar dentro del molde, desmoldar y llevar al frío hasta servir.
Espolvorear con azúcar glass y sacar del frío unos 20 mn antes de consumir.