Una deliciosa crema de naranja basada en el óleo Naturaleza muerta con cesta y seis naranjas, de Vincent Van Gogh.
Vincent Van Gogh nace en Groot-Zundert (Países Bajos) en 1853 y muere en 1890 en Auvers-sur-Oise (Francia).
Era el mayor de los seis hijos de un pastor protestante, y mantuvo con su hermano Theo, cuatro años menor que él, una relación que sería determinante en su existencia y su trayectoria artística. La correspondencia que ambos intercambiaron a lo largo de toda la vida es el testimonio de la intensidad de esta relación.
Este óleo, en colección privada, nos muestra un instante fugaz. Una indefinida esquina en una superficie igualmente indefinida. Utilizando colores optimistas, el pintor nos ofrece una imagen habitual casi vulgar. Unos frutos derramados sobre un cesto donde no resulta importante el orden o la disposición de los elementos.
Los azules verdosos nos sumergen en un mundo cotidiano, vibrante y silencioso.
Un instante en que la comida se convierte en una imagen eterna.
El Posset era una bebida elaborada en la cocina medieval cuyo principal ingrediente era la leche y que se servía caliente. Se añadía a la leche otros ingredientes como vino o cerveza e incluso algunas especias. Se consideraba un remedio casero contra las enfermedades menores, tales como los resfriados leves. Posteriormente se fue refinando y con el objeto de proporcionar consistencia, se le añadieron cereales y huevo para ampliar sus beneficios nutritivos.
Aunque lo que hoy entendemos como Posset, es decir, una crema cuajada sin adición de espesantes, es habitualmente de limón, podemos elaborarlo con cualquier sabor tal como el caramelo, café, fresa, etc, pero siempre con el añadido del zumo de limón verde, que le proporcionará a la crema la untuosidad y espesor.
Para su elaboración necesitamos,
- Medio litro de nata para montar con al menos 35% de materia grasa.
- El zumo de un limón muy verde.
- 4 cucharadas de azúcar.
- El zumo y la ralladura de dos naranjas.
Poner a hervir la nata con las pieles de las naranjas cortadas en tiras. En cuanto llegue a ebullición, apartar del fuego y dejar infusionar durante 20 mn.
Retirar las pieles de la naranja, volver a poner al fuego y en cuanto hierva añadir el azúcar e inmediatamente los zumos. Espesará muy rápidamente, así que lo verteremos en vasos pequeños, lo dejaremos reposar unos minutos, y se introducirá al frío durante al menos tres horas antes de servir.
Aún quedan plazas en el último curso de decoración de galletas navideñas de este año el día 18 de Diciembre. Más información AQUÍ.
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Vincent Van Gogh nace en Groot-Zundert (Países Bajos) en 1853 y muere en 1890 en Auvers-sur-Oise (Francia).
Era el mayor de los seis hijos de un pastor protestante, y mantuvo con su hermano Theo, cuatro años menor que él, una relación que sería determinante en su existencia y su trayectoria artística. La correspondencia que ambos intercambiaron a lo largo de toda la vida es el testimonio de la intensidad de esta relación.
Tras recibir una esmerada educación en un internado privado, con dieciséis años entró como aprendiz en la filial de La Haya de la galería de arte parisina Goupil & Cie., fundada por su tío Vincent; allí conoció las obras de la escuela de Barbizon.
El traslado de Van Gogh a Londres en 1873 señaló el inicio de una primera etapa creativa. Tras un rechazo amoroso, se volvió cada vez más solitario, hasta que en 1878 se vio impelido por la necesidad de entregarse a sus semejantes, y tras intentar estudiar teología, decidió satisfacer su vocación uniéndose a los mineros de la Borinage. En este período realizó una serie de dibujos de los mineros.
Hacia 1880, tras ser expulsado por su excesiva implicación, descubrió en la pintura su auténtica vocación, considerándola una vía para consolar a la humanidad. En los primeros años de la década de 1880 estudió con diversos pintores, entre los que cabe destacar a Anton Mauve. Su rápida evolución y el conocimiento de los impresionistas lo llevaron a abandonar la enseñanza académica y a reunirse con Theo en París en 1876.
Su hermano le presentó a Pissarro, Seurat y Gauguin, y esta situación coincidiría con la definición de su pintura. Su paleta se tornó definitivamente colorista y su visión, menos tradicional, dando forma a su personal visión del postimpresionismo. Su interés por el color y por la captación de la naturaleza lo indujo a trasladarse a Arles, donde su obra fue progresivamente expresando con mayor claridad sus sentimientos sobre lo representado y su propio estado mental.
Con la pretensión de crear el grupo de los impresionistas del sur, Van Gogh alquiló una casa donde invitó a los artistas con quienes compartía intereses y en la que Gauguin pasaría dos meses. La primera crisis mental, en la que se cortó parte de la oreja izquierda, tuvo lugar en la Navidad del mismo año 1888.
En abril del año siguiente, ante el temor a perder su capacidad para trabajar, pidió ser ingresado en el hospital psiquiátrico de Saint-Rémy-de-Provence donde permaneció doce meses. Tras sufrir diversos ataques y ante la imposibilidad de salir al exterior a pintar, realizó obras relacionadas con el hospital, retratos de médicos y reinterpretaciones de obras de Rembrandt, Delacroix y Millet.
La pérdida de contacto con la realidad y una progresiva sensación de tristeza son las claves de este período en el que Van Gogh desarrolló un estilo basado en formas dinámicas y en el uso vigoroso de la línea, de lo cual resultó una pintura más intrépida y visionaria que la de Arles.
Sin conseguir superar el estado de melancolía y soledad en que se encontraba, en mayo de 1890 se trasladó a París para visitar a su hermano Theo. Por consejo de éste, viajó a Auvers-sur-Oise, donde fue sometido a un tratamiento homeopático por el doctor, y pintor aficionado, Paul-Ferdinand Gachet.
En este pequeño pueblo retrató el paisaje y sus habitantes, intentando captar su espíritu. Su estilo evolucionó formalmente hacia una pintura más expresiva y lírica, de formas imprecisas y colores más brillantes. Pese a que unos meses más tarde el doctor Gachet consideró que se encontraba plenamente curado, su estado de ánimo no mejoró debido a los sentimientos de culpa provocados por la dependencia de su hermano Theo y por su fracaso profesional. Sumido en esta situación de angustia, el 27 de julio Van Gogh se descerrajó un disparo en el pecho; murió dos días más tarde.
Este óleo, en colección privada, nos muestra un instante fugaz. Una indefinida esquina en una superficie igualmente indefinida. Utilizando colores optimistas, el pintor nos ofrece una imagen habitual casi vulgar. Unos frutos derramados sobre un cesto donde no resulta importante el orden o la disposición de los elementos.
Los azules verdosos nos sumergen en un mundo cotidiano, vibrante y silencioso.
Un instante en que la comida se convierte en una imagen eterna.
El Posset era una bebida elaborada en la cocina medieval cuyo principal ingrediente era la leche y que se servía caliente. Se añadía a la leche otros ingredientes como vino o cerveza e incluso algunas especias. Se consideraba un remedio casero contra las enfermedades menores, tales como los resfriados leves. Posteriormente se fue refinando y con el objeto de proporcionar consistencia, se le añadieron cereales y huevo para ampliar sus beneficios nutritivos.
Aunque lo que hoy entendemos como Posset, es decir, una crema cuajada sin adición de espesantes, es habitualmente de limón, podemos elaborarlo con cualquier sabor tal como el caramelo, café, fresa, etc, pero siempre con el añadido del zumo de limón verde, que le proporcionará a la crema la untuosidad y espesor.
Para su elaboración necesitamos,
- Medio litro de nata para montar con al menos 35% de materia grasa.
- El zumo de un limón muy verde.
- 4 cucharadas de azúcar.
- El zumo y la ralladura de dos naranjas.
Poner a hervir la nata con las pieles de las naranjas cortadas en tiras. En cuanto llegue a ebullición, apartar del fuego y dejar infusionar durante 20 mn.
Retirar las pieles de la naranja, volver a poner al fuego y en cuanto hierva añadir el azúcar e inmediatamente los zumos. Espesará muy rápidamente, así que lo verteremos en vasos pequeños, lo dejaremos reposar unos minutos, y se introducirá al frío durante al menos tres horas antes de servir.
Aún quedan plazas en el último curso de decoración de galletas navideñas de este año el día 18 de Diciembre. Más información AQUÍ.
BOA A SUA SUGESTÃO GOSTO MUITO DE DOCES COM LARANJA.
ResponderEliminarE COMO SEMPRE DO SEU TEXTO, VIR AQUI APRENDE-SE SEMPRE ALGUMA COISA.
BOM FIM DE SEMANA
BJS
Que maravilla ademas que me encanta leerte contigo se aprende muchisimoooo,la receta se ve genial tiene que estar riquísimo.un beso
ResponderEliminarIsabel que postre mas sugerente! el aroma de naranja tiene que ser una delicia, mmmm!!! siempre es un placer venir a leerte guapa
ResponderEliminarUn beso
Que maravilla leerte, una pequeña puerta abierta a la vida de los pintores junto con una receta como esta siempre me sorprende, desconocía esta bebida. Besitos guapa.
ResponderEliminarMe encanta!!!! aprendo mucho con tu blog!
ResponderEliminarun besote
espero tu visita!
Me gustan estos brebajes así que me tomo uno para el desayuno que estoy en en ello.
ResponderEliminarBuen día.Un beso.
Qué maravilla de vasito, apetecible cien por cien y si es anti resfriados, mejor que mejor, con el fresco que hace ya...
ResponderEliminarMe encantan las cremas de cítricos, esta tengo que probarla. El fin de semana pasado hice una de mandarina. Ese toque ácido se agradece después de una comida. Estoy pendiente de que me confirmen si tengo una comida ese día, a ver si consigo hacer el curso de galletas!
ResponderEliminarPara mi, los colores de V.Gogh son distintos a los de otros pintores, como si utilizase una paleta propia, no hay un naranja como el de este cuadro, por ejemplo. Este posset ha de estar delicioso. Por cierto, felicidades por las fotos!
ResponderEliminarSi me gusta la cocina ya mezclada con el arte y con el tuyo al contarlo para que decirte.
ResponderEliminarMe impresiona la evolución que hizo Van Gogh en tan pocos años.
Si alguien quisiera contar algo de mi, creo que en un par de lineas terminaría!!
Me encantan estas entradas tuyas en que relacionas la pintura y la cocina. Son verdaderas clases magistrales. Este posset me parece una delicia y no voy a quedarme sin probarlo.
ResponderEliminarBuen día
Pobre pintor, con toda su angustia todavía quería consolar a la humanidad, a mi desde luego me deleitan sus pinturas y aunque esta no me gusta especialmente, viene genial para este posset que no conocía y te agradezco, porque me ha encantado y lo haré pronto.
ResponderEliminarBesos.
Siempre me gustó Van Gogh, la primera vez (no hace años ni ná) porque leí sobre su vida y me pareció tan triste...
ResponderEliminarTu postre es delicioso, yo es que oigo naranja y ya estoy metiendo el hocico
Besos guapa
Esta crema deliciosa Isabel, y la biografía de Van Gogh muy triste, pobre hombre ir dándose cuenta de como perdía la razón es espeluznante, me encanta como nos escribes y lo bien que lo haces. Besosss.
ResponderEliminarComo siempre una clase magistral.
ResponderEliminarMe copio la receta que ha de estar muy rica, solo una pregunta, puedo sustituir el limón muy verde por una lima?
Besos.
llevando limón seguro que está rico y como es parecido a la crema, pues marchando un vasin para la mua...osea pa miiii.
ResponderEliminarbexinos
Que cremosa se ve, una delicia
ResponderEliminarAdoro tus entradas...Son todas espectaculares!!Besos
ResponderEliminarMe encantan tus introducciones tan artisticas todas, enhorabuena.
ResponderEliminarUn beso
qué aspecto, me parece un buenísimo postre para las navidades, que son fechas en las que llenamos la mesa, comemos demasiado y para cuando llegamos al postre no hay espacio para mucho, parece tan delicada y ligera...
ResponderEliminarEstoy estudiando fotografía y uno de los ejercicios que nos han hecho hacer para la semana que viene es fotografiar un bodegón... parece sencillo, verdad? pues es complicadísimo! y porque te cuento este rollo? pues porque veo ese bodegón y me gusta, es bonito, pero no encuentro significado... será que no tengo arte??? Pues mal vamos!!! en fin, que el posset de naranja que nos traes me parece una auténtica delicia. Un beso guapa.
ResponderEliminarQue buena pinta tiene que estar delicioso tus entradas simpre son muy interesantes
ResponderEliminarbesos
http://mipasioncocinar.blogspot.com/
Qué triste la historia de Van Gogh, fue un gran artista que no obtuvo el suficiente reconocimiento en su época.
ResponderEliminarEs increíble pensar que ahora sus cuadres valen millones de euros, cuando él murió en la pobreza, presa de la locura.
En cuanto al posset no lo conocía pero me lo apunto ahora mismo porque me gusta mucho la textura que se ve en la foto, se ve cremoso y al mismo tiempo ligero y tiene un color extremadamente delicado.
El problema será conseguir un limón bien verde, ya me imagino que una lima no servirá.
Un beso y enhorabuena porque cada día te superas
no conocía la existencia del posset, lo que me estaba perdiendo! me gusta mucho la textura,aunque tengo unas dudas. Por qué el limón verde? Y no es demasiado tanto jugo de limón, no es demasiado ácido después?
ResponderEliminarDeliciosa cremita de naranja.
ResponderEliminar¡Me encanta Van Gogh y su historia!. Con Manet, Picasso, Dalí y Klimt, Janina... entre tantos otros... de mis favoritos.
Besitos.
Me encanta la obra de este pintor, que llevó una vida bastante atormentada y ya sabes que me gustan mucho estas entradas tan didácticas con que nos deleita.
ResponderEliminarUna bebida maravillosa con mucha cremosidad. Me ha encantado.
Besitos guapa,
tiene que estar maraavillosa!!! tan cremosa...la entrada es fantástica, me encanta.
ResponderEliminarbicos
Me encanta que nos cuentes un poco de historia!!
ResponderEliminarSiempre es agradable que nos cuentes un poco de historia acompañada de un plato. La crema se ve muy rica y además fácil y con pocos ingredientes. Un placer!!. Besos
ResponderEliminarMe encanta la entrada llena de historia que preparas todos los días...la crema me la apunto porque seguro que me gusta!!!
ResponderEliminarBesos
Me parece que este posset tiene que estar rico rico y con una textura de lo más apetecible.
ResponderEliminarUn beso.
No soy muy fanática de los postres de naranja, pero la verdad que se ve riquísima la crema. Veo que en este tiempo que he estado desconectada ha habido cambios en tú blog no? Muy original e interesante unir el arte de la pintura con la cocina! Como siempre, nos dejas con la boca abierta en cada entrada.
ResponderEliminarUn beso!
Mas sencillo y mas sugerente, imposible, cuando lo pruebe te digo, aunque con la textura que tiene, te puedo ir adelantando que me va a encantar.
ResponderEliminarHasta la próxima, un abrazo.
Pedro
No conocia lo del posset y me ha llamado mucho la atención, la crema tiene una pinta estupenda y seguro qeu está deliciosa.
ResponderEliminarUn besito y feliz sábado.
Isabel ¡¡¡ me encantas!!!no sé de donde sacas estas recetas, te imagino con un libro antiguo de esos grandes como los de harry potter, con miles de recetas desconocidas y tú ahí busca que te busca
ResponderEliminarbesos
Me encanta venir los sábados por aquí! Van Gogh y la cremita...exquisitos!
ResponderEliminarFeliz finde!
Isabel, las fotos del plato de hoy son excepcionalmente tentadoras....y además soy una enamorada del impresionismo. Hace 3 años me recorrí la mayor parte de la provenza con una amiga que vivía en Marsella y me empapé de todas estas historias....una zona que me encantó. Este postre me apetece probarlo sobremanera.....lo puedo acompañar con la absenta con la que se "inspiraban" estos artistas, que me traje de aquel viaje y aún no probé. Maravillosa entrada como siempre @superfan.
ResponderEliminarTiene una pinta deliciosa y muy cremosa, seguro que suave en cuanto la pruebas.
ResponderEliminarmmm que pinta tiene! no conocía esta receta y viendo que es medieval todavía más interesante. La prepararé seguro!
ResponderEliminarBesos!
guau.......que deliciosa...suave y FACIl.......es lo mio....!!!!!
ResponderEliminarUn pintor que no deja indiferente, tanto por sus obras como por su vida. Creo que jamás imaginó el prestigio que un día alcanzaría su obra.
ResponderEliminarLa crema me ha parecido una delicia y además fácil de hacer.
¡Hasta pronto, Isabel!
¡que rica esa cremita Isabel! y lastima los curso que no me pillen cerca, que si no ya estaba mas que apuntada y hoy me acuesto un poco mas culta gracias a tu relato .
ResponderEliminarun besote
Isabel, vaya recetón más sencillo e impresionante ... además de medieval. ¡Qué vicio esto de leer la procedencia de todo! qué vida tan triste, para un ser tan grande.
ResponderEliminarMaravilloso el desarrollo de todo lo que nos relatas, muchísimas gracias preciosa.
Xtos xulísima Isabel.
¡Qué bueno el posset! Cremoso, apetecible...
ResponderEliminarLeí el libro "Cartas a Theo" y también recomiendo la película sobre Van Gogh que protagonizó Kirk Douglas, "El loco del pelo rojo".
Son una delicia todas tus entradas, y también las de los sábados, acompañadas de tus comentarios.
Besos
Nerea
Te quedo una textura preciosa!!!!Tiene que estar buenisimo!!!!!!
ResponderEliminarBesos
Un post expléndido Isabel,me encanta que nos des todas estas clases que ya nos viene muy bien recordar,y además este postre tan ricamente apetecible,el posset,madre mía,que textuta,me encanta cielo.
ResponderEliminarUn besito enorme y feliz fin de semana guapísima.
Hola buenas noches¡¡
ResponderEliminarEspero que tengas un feliz fin de semana
Deliciosa recetas Isabel me encanta!!!! Espero que tengas algo rico para las próximas fiestas
Van Gogh es mi pintor favorito, me gusta todo de él y tengo un esmalte con el retrato del Dr. Gachet y muchísimas laminas enmarcadas por toda la casa.
ResponderEliminarEl posset de naranja casi me gusta tanto como la pintura de él. jejej.
En el Pirineo Aragonés tenemos un pico de más de 3000 metros que se llama Poset.
Un beso
¡¡Como siempre tus entradas tan instructivas!!! Y esa cremita de naranja tiene una pinta que no veas!!! Y las fotos, preciosas!!!
ResponderEliminarBesos guapa!!!
Creo que hoy nos hemos puesto de acuerdo en publicar un postre con naranja. Me llevo tu receta que me encantan los postres con frutas.
ResponderEliminarTus entradas relacionando el arte con la cocina son espectaculares y amenizan la lectura. Siempre me fascinó la vida de los artistas y sus obras por ello me encanta leerte.
Bssssssss
me encanta tu postre me lo llevo un besin
ResponderEliminarinteresante ese postre, no lo conocia, me lo anoto y gracias por tus relatos
ResponderEliminar¡¡besos¡¡
Querida Isabel,
ResponderEliminarAquí me tienes leyendo despacio tu entrada, tratando de ir poco a poco disfrutando de todo este mundo que tanto me gusta, no podré hacerlo siempre, hay días que no puedo ni con mi alma, pero hoy, hoy si que he podido y me ha encantado no solo la información que nos das del pintor si nó la receta de naranja que nos pones...
me encanta volver a poder dejarte unas líneas, ya lo sabes...un beso enorme!!!
Nos tientas con una delicia de naranja....caigo en tu tentación e intentaré hacer tu receta, me gusta mucho la naranja ;) besos
ResponderEliminarQue alegorías tan fantásticas entre el arte y la comida. Dan ganas de mordisquear la pantalla leyendo tus entradas.
ResponderEliminarBesos.
Un vasito super apetecible y con sabor a naranja..que me encanta!:)
ResponderEliminarun besotee
Tiene un aspecto delicioso y de lo más nutritivo.
ResponderEliminarUn besín
¡Nata pura aromatizada! Qué delicia y qué pecado..!
ResponderEliminarTiene una textura entre crema y yogur. Todo un vicio...
ResponderEliminarUn besito
A pesar de llevar nata seguro que me la tomaría.
ResponderEliminarBesos.
Muy rica este crema, se le puede dar muchas utilidades. Que pena no poder ir al curso del dia 18 por que estare fuera, ya que el dia 4 lo tienes completo, es que tambien estos dias que pusiste lo del curso no estaba. Un besin. La casita de Rosmary.
ResponderEliminarComo siempre disfrutando de la entrada.
ResponderEliminarLa receta me parece muy rica, todo lo que tiene naranja me encanta.
Isabel:
Yo todo lo contario lo tengo que tener todo con mucha antelación por el contrario me pongo nerviosisima , ni tanto ni tan calvo
bss
Patricia
Ai Van Gogh, le tengo un cariño muy especial porque ya en el insituto hice un trabajo sobre él! O sea que con esta entrada me has robado el corazón
ResponderEliminarBesos
Sandra
Que maravilla Isabel, una obra de arte tu entrada, la receta, las fotos todo! Lo he disfrutado mucho deveras.
ResponderEliminarUn abrazo!
Me gusta mucho Van Gogh y el homenae que has hecho me ha encatado y la receta pues quiero probarlo. Genial como siempre.
ResponderEliminarBesines
Holaaaaaa
ResponderEliminarcuanto tiempo!!
me encanta Van Gogh!!es uno de mis preferidos!!
y esa cremita de naranja tiene que estar de miedo!!!
muchos besossss
Intenté ponerte un comentario ayer desde el móvil pero no me dejó. O igual está por ahí perdido entre los 67 que hay...
ResponderEliminarDecía que si está tan rico como los yogures lo probaré seguro!!
Contigo se aprende, y mucho. Me encanta descubrir recetas tan ricas y al mismo tiempo aprender cosas nuevas. Eres una genia! normal que nos tengas a todos aquí enganchados!
ResponderEliminarQué dulce... y qué bonito el cuadro para tu inspiración! me encanta cómo relacionas arte y cocina....... artista!!!
ResponderEliminarUn beso!
No conocía esta receta, pero se me antoja deliciosa...
ResponderEliminarEnhorabuena por el éxito de tus cursos!
¡Con lo que me gustan las naranjas! Esta crema tiene que estar deliciosa y los ingredientes son muy sencillos, me llevo la receta.
ResponderEliminarBesos.
Hola,
ResponderEliminarmenuda cremita te has marcado...
me has dejado totalmente alucinada, por la sencillez y la pinta tan estupenda que tiene...
la haré sin flata mañana.... en cuanto encuentre ese limon muy verde !!
bss
feliz semana
Qué interesante la información y qué buena pinta tiene este posset. Irresistible.
ResponderEliminarUn abrazo
Magnífica receta y magnífico el movimiento impresionista !!
ResponderEliminarHOLA ISABEL
ResponderEliminarA mi que las cremas y todo lo que lleve naranja me encanta, a buen seguro que disfrutaría mucho paladeando tu cremita.
Buena explicación de uno de mis impresionistas preferidos.
GRACIAS GUAPA. que inícies la semana tan inspirada como ahora con estas ESTUPENDAS RECETAS!!
Una verdadera obra de arte como esa pintura.
ResponderEliminarBESITOs
http://notasenmicocina.blogspot.com/
Esta no la conocía, desde luego que tiene una textura supercremosa tiene que se un gustazo meter la cuchara.
ResponderEliminarUn beso
Gracias por el comentario que me has dejado en mi blog. Me has alegrado el día! Jeje!
ResponderEliminarMe ha encantado la crema y sus orígenes. Puede que me anime a preparar una de café...
Besos!
Anna
Uauuuuuuuu esto tiene que estar bueniiiiiisimo.
ResponderEliminar¡Qué rica!. Otra receta que me llevo a mi menú de Navidad.
ResponderEliminarBesos!
Precioso liendo y delicioso postre.
ResponderEliminarUn beso y feliz semana
No soy yo muy de Van Gogh, digamos que le tengo un poco de coraje, pero sí de tu cremita, que tiene un aspecto genial.
ResponderEliminarGracias por esta receta.
Besitos.
Que textura más increible que tiene. Me encanta!!! Besos
ResponderEliminarQue delicia!! lo probaré. Saludos
ResponderEliminarMaravilloso Isabel, la receta, el resultado y toda la presentación...enhorabuena!!
ResponderEliminarFeliz semana
Cecilia
Qué delicia Isabel. Tal sencillo de preparar que resistirse es absurdo. La textura que se ve en la foto de la cucharada es increíble.
ResponderEliminarMmmmmm me comía uno ahora mismo de postre :)
Eres total....Isabel, aunque leer la introducción me puso un poquito triste, el postre me curo.
ResponderEliminar*.*BesiKos!