Tarta de mi abuelo.
La única tarta que sabía hacer y que hacía como nadie, y la tarta favorita de mi padre. De ahí que fuese mi regalo dulce del día de San José para él.
Muchos dulces tienen historia; se inventaron para conmemorar algo o agasajar a alguien, y muchos de ellos perduran a lo largo del tiempo y son repetidos o reinventados una vez tras otra.
Mi querido abuelo no inventó esta sencilla tarta de zanahoria, tampoco soy yo ahora la única que la prepara, pero tengo la posibilidad de hacerla llegar a diferentes lugares del mundo y permitir su copia o reinvención, y quizá hasta convertirla en la próxima tarta especial de personas a las que nunca conoceré.
Esta tarta tiene una historia, como la Sacher, la Victoria o la Saint Honoré, pero es una historia personal, de recuerdos infantiles y momentos añorados.
Las personas que ya no están entre nosotros viven para siempre porque conservan un lugar en nuestro corazón, y seguirán vivas mientras nosotros lo estemos. Una parte de mi abuelo vive para mí en la elaboración de esta tarta, en cada uno de sus pasos y en su sencillo e increíble sabor.
Y así lo siento cada vez que la preparo, y aunque esas personas que algún día lleguen a hacerla sean para siempre completos desconocidos, estarán llevando esa parte de mi abuelo a sus casas, y espero que les haga tan felices al saborearla como él me hizo sentir a mí.
Para su elaboración necesitamos,
- 1 kg de zanahorias peladas y cortadas en trozos.
- 15 bollos suizos.
- 80 gr de azúcar.
- 150 gr de coco rallado.
- Leche.
Mazapán,
- 100 gr de almendra molida.
- 100 gr de azúcar glass.
- 1 clara de huevo.
- Colorante naranja y verde.
Se cuecen las zanahorias hasta que estén blandas.
Machacarlas y mezclarlas con el azúcar y el coco. Formar una pasta y reservar.
Cortar los bollos suizos por la mitad.
Remojar las rebanadas en leche fría, escurrir el exceso e ir colocando sobre un molde desmontable cubierto con papel film con sobrante hacia los lados para poder cubrir el pastel al final.
Capa de crema de zanahoria.
Sobre ella dispondremos otra capa de bollos remojados y después el resto de la crema de zanahoria. Terminar con capa de bollos y cubrir con el film.
Dejar reposar en la nevera toda la noche con un peso encima.
Para el mazapán mezclar los ingredientes menos los colorantes. Separar dos trozos, uno mayor que otro, y teñir mezclando bien.
Formar bastones con la masa naranja que iremos estrechando en un extremo y achatándolos en el más ancho, haciéndolos rodar entre las manos. Colocar un pedúnculo con mazapán verde e imprimir unas marcas sobre la "zanahoria" con un cuchillo. Hornearlas durante 2-3 mn a máxima temperatura con gratinador.
Desmoldar la tarta retirando el aro desmontable del molde y separando con cuidado el papel film. Servir espolvoreada con azúcar glass o coco rallado, y acompañada de las zanahorias de mazapán.
La única tarta que sabía hacer y que hacía como nadie, y la tarta favorita de mi padre. De ahí que fuese mi regalo dulce del día de San José para él.
Muchos dulces tienen historia; se inventaron para conmemorar algo o agasajar a alguien, y muchos de ellos perduran a lo largo del tiempo y son repetidos o reinventados una vez tras otra.
Mi querido abuelo no inventó esta sencilla tarta de zanahoria, tampoco soy yo ahora la única que la prepara, pero tengo la posibilidad de hacerla llegar a diferentes lugares del mundo y permitir su copia o reinvención, y quizá hasta convertirla en la próxima tarta especial de personas a las que nunca conoceré.
Esta tarta tiene una historia, como la Sacher, la Victoria o la Saint Honoré, pero es una historia personal, de recuerdos infantiles y momentos añorados.
Las personas que ya no están entre nosotros viven para siempre porque conservan un lugar en nuestro corazón, y seguirán vivas mientras nosotros lo estemos. Una parte de mi abuelo vive para mí en la elaboración de esta tarta, en cada uno de sus pasos y en su sencillo e increíble sabor.
Y así lo siento cada vez que la preparo, y aunque esas personas que algún día lleguen a hacerla sean para siempre completos desconocidos, estarán llevando esa parte de mi abuelo a sus casas, y espero que les haga tan felices al saborearla como él me hizo sentir a mí.
Para su elaboración necesitamos,
- 1 kg de zanahorias peladas y cortadas en trozos.
- 15 bollos suizos.
- 80 gr de azúcar.
- 150 gr de coco rallado.
- Leche.
Mazapán,
- 100 gr de almendra molida.
- 100 gr de azúcar glass.
- 1 clara de huevo.
- Colorante naranja y verde.
Se cuecen las zanahorias hasta que estén blandas.
Machacarlas y mezclarlas con el azúcar y el coco. Formar una pasta y reservar.
Cortar los bollos suizos por la mitad.
Remojar las rebanadas en leche fría, escurrir el exceso e ir colocando sobre un molde desmontable cubierto con papel film con sobrante hacia los lados para poder cubrir el pastel al final.
Capa de crema de zanahoria.
Sobre ella dispondremos otra capa de bollos remojados y después el resto de la crema de zanahoria. Terminar con capa de bollos y cubrir con el film.
Dejar reposar en la nevera toda la noche con un peso encima.
Para el mazapán mezclar los ingredientes menos los colorantes. Separar dos trozos, uno mayor que otro, y teñir mezclando bien.
Formar bastones con la masa naranja que iremos estrechando en un extremo y achatándolos en el más ancho, haciéndolos rodar entre las manos. Colocar un pedúnculo con mazapán verde e imprimir unas marcas sobre la "zanahoria" con un cuchillo. Hornearlas durante 2-3 mn a máxima temperatura con gratinador.
Desmoldar la tarta retirando el aro desmontable del molde y separando con cuidado el papel film. Servir espolvoreada con azúcar glass o coco rallado, y acompañada de las zanahorias de mazapán.
Hace muchos años que no tomo la tarta de zanahoria. El detalle de las zanahorias de mazapán me encanta.
ResponderEliminarbesines
Nunca la he probado, y se me hace raro una tarta de zanahoria..pero la verdad que de aspecto se ve riquísima! Y las zanahorias de decoración, monísimas..jeje
ResponderEliminarSaludos.
Isabel, es precioso lo que has escrito sobre tu abuelo y, cuanta razón tienes en que, si alguien hace ésta tarta, una parte de tu abuelo estará allí, en sus casas
ResponderEliminarEs una tarta magnífica, tanto por sus ingredientes como por la historia que conlleva
Un beso, guapa
Estas recetas hay que guardarlas como paño en oro, la receta se ve genial.
ResponderEliminarSaludos
Buenos dias!!! pero que bien empezamos la semana!!!
ResponderEliminarEsta tarta es tan especial que todo lo que digamos se quedará en poco, son de esas recetas entrañables que hacian nuestros seres querídos y siempre siempre serán maravillosas, cada bocado te llenará de bonitos recuerdos de esa persona tan especial y tan querída.
La verdad que es preciosa , y esas zanahorias tna bonitas..!!
Me ha encantado esta entrada.
Mil besitos guapa
Una tarta bueníma de aspecto con el ingrediente especial de la nostalgia y los recuerdos que traen.
ResponderEliminarBesos.
Mi tía Emilia la hacía con bizcochos de soletilla y la bordaba, como todo lo que hacía...
ResponderEliminarMi suegra también la hace. Es la tarta oficial de los cumpleaños y está buenísima!
ResponderEliminarIsabel tiene un corte precioso ,me la llevo a favoritos ya estoy pensando en el finde y eso que hoy es lunes buaaaaaaaa
ResponderEliminarbesote
loli
ISABEL ...ya te has animado al fondant eh? menudas zanahorias tan preciosas ...voy a tener que estrenarme yo tambien ..y me resisto ...La tarta sensacional ..nunca la hice ..tomo nota ..entre las mil y una tuyas que tengo jajaja ..besos MARIMI
ResponderEliminarQué rica!!! Te ha quedado estupenda...y qué zanahorias tan bonitas...Por cierto, ya encontré la mermelada de bayas de espino amarillo...es un pelín amarga ...tengo que buscar cosillas para ella.
ResponderEliminarUn bico
Isabel hace unos dias hice unas trufas de zanahoria y coco que vi en un blog, y entonces me acorde de que mi tia nos hacia una tarta de zanahoria que nos encantaba, sobre todo a mi hermano pequeño. Y mira por donde la pones hoy, es igualita a la que hacia mi tia, la pobre yo no esta para hacerla pero me quedo con tu receta y ya verás que sorpresa le doy a mi hermano. Muchas gracias, me quedo con esa parte de tu abuelo.
ResponderEliminarUn beso
Afri
Isabel! que me he emocionado!! sera porque yo tambien tengo muy buenos recuerdos de mi abuelo!
ResponderEliminarla tarta magnifica, como todo lo que haces guapa!
Y una cosita que me acabas de enseñar, y que yo tenia ganas de aprender.. el MAZAPAN!!! adios al fondant para las decoraciones pequeñitas de las tartas... que luego nadie se lo come!
Un besazo guapa!
¡VAYA TARTA MAS BONITA!LAS ZANAHORIAS SON PRECIOSAS.CREO QUE LA TARTA DEBE DE ESTAR DELICIOSA Y MAS AUN SIENDO UN HOMENAJE MUY BONITO A TU ABUELO.
ResponderEliminarUna tarta muy asturiana y archiconocida. Forma parte de la infancia de tod@s nosotr@s.
ResponderEliminarBss
Qué palabras más entrañables, se nota en cada letra el sentimiento que guardas hacia tu querido abuelo, seguro que estará super orgulloso de ti, la tarta es sencillamente impresionante.
ResponderEliminarBesitos.
Que rico ese pastel¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarMe encanta la presentación y el mazapan
Besos
Qué buena pinta y qué originalidad con la preparación, lo mejor es cuando la estás comiendo todo lo que evoca¡¡¡Los olores, sabores... son cosas que se quedan fijadas en nuestra memoria y con estas cosillas vuelven a nosotros.
ResponderEliminarEs una preparación tan especial que poco podemos decir.
ResponderEliminarEs cierto, todos lo que faltan siempre permanecen en nosotros, y que mejor manera de recordarlos que compartiendo lo que compartíamos con ellos y manteniendolos en nuestra memoria.
Que tengas buena semana.
Besos
Qué rica y original,Isabel, nunca he probado una tarta como esa, se ve deliciosa.
ResponderEliminarSaludos
Es una pasada!!! especial y bonita :) y...rica seguro! tienes ingredientes parecidos al ponche sgoviano no? q rica tiene q estar q envidiaa
ResponderEliminarNo conocia esta tarta.pero estas tartas sque ya hacian los abuelos para mi son las mejores, y sobre todo el buen sabor que tienen a los bonitos recuerdos de la infancia.
ResponderEliminarLa tengo que probar en honor a tu abuelo.
Un beso
Isabel, encanta tu entrada de hoy. Yo cuando la haga, que la haré porque me parece espectacular, me acordaré de tí. Me chiflan las zanahorias, te han quedado preciosas. Eres una artistaza.
ResponderEliminarBesos guapa
Se ve deliciosa, pero lo que más me gusta es la historia que la acompaña y la hace mucho más apetecible, seguro que provoca al comerla sensaciones como las recetas de "Como Agua para Chocolate" Besos Carlota
ResponderEliminarQué tarta de zanahoria tan original, me ha encantado. Y el post es precioso de principio a fin, que maravilla.
ResponderEliminarQué cucas te quedaron las zanahorias de mazapán, me encantan!
Un besote, y feliz comienzo de semana!
Muy bonita la historia, y la tarta debe estar super jugosa, muy buena.
ResponderEliminarBesos
Qué tarta tan diferente y qué bonita queda, me tengo que animar a hacer una tarta de zanahorias. Lo que cuentas de tu abuelo es precioso, es normal que esta tarta te traiga tantos recuerdos
ResponderEliminarUna tarta tan entrañable para ti, es un regalo especial para todos ..Felicicidades y gracias por compartirla.
ResponderEliminar*.* Besos y hasta pronto.
Tu entradilla de hoy fantástica emocionalmente hablando.
ResponderEliminarLa tarta aunque lleve zanahoria bien diferente, con una presencia perfecta.
El detalle de las chuches de zanahoria un detallazo.
Un saludito
Isabel qué tarta más bonita y el post me ha encantado porque es muy emotivo recordar así a tu abuelo y que sigas manteniendo su receta. Te ha quedado estupenda y los adornos de las zanahorias muy bonitos también. Besitos y feliz semana guapa...
ResponderEliminarQue bonitas palabras, tu abuelo estara orgulloso seguro.
ResponderEliminarLa tarta tiene muy buena pinta y más con esas zanahorias que le has puesto.
Isabel,
ResponderEliminarLa tarta se quedo presiosa e riquicima... Me gosto mucho lo que escrebieste sobre tu abuelo.
La receta esta fantastica : )
Besitos
Absolutamente fantástica... y la historia muy bonita. Es curioso cómo los sabores nos recuerdan a personas....... disfruta mucho comiéndola, y acuérdate mucho de él.
ResponderEliminarUn abrazo!
Pense que me iba a encontrar la tipica tarta que ponen en Asturias como del abuelo o la abuela con galletas y chocolate y me encuentro esta tarta estupenda y muy original,porque yo no se desde que cantidad de años se hara en tu casa pero parece sacada de un libro moderno de reposteria.
ResponderEliminarMe ha encantado la receta.Besos Esther
Preciosas palabras sobre tu abuelo, me han emocionado, me ha recordado a los mios a los que quiero tanto, y es verdad que mientras los llevemos en el corazon, las personas que ya no estan entre nosotros siguen viviendo.
ResponderEliminarYo aprendí mucho de los mios, y espero que algún dia (lejano, por favor....) mi nieto y espero que futuros nietos, se acuerden con tanto cariño de mi, como yo de los mios..
Por cierto la tarta espectacular.. la tengo que probar
Un beso y feliz semana
http://desdelacuinadelhort.blogspot.com/
Una dulce y entrañable tarta,tiene que estar fantástica en casa mi madre también la ha preparado en alguna ocasión.
ResponderEliminarPreciosas las zanahorias, me encanta como te ha quedado
Un besote
que bonita, las zanahorias te han quedado perfectas!!para mi la mejor tarta del mundo, es una que me hacía de pequeña de zanahoria, coco y chocolate y con galletas. Parece muy sencilla, verdad??pues no he sido capaz de dar con la receta y por circunstancias de la vida, mi madre nunca la apuntó porque se la sabía de memoria y no se la receta!!!y me da un coraje cada vez que me acuerdo....asi que, si sabes alguna receta de la tarta que te he dicho, dimelo y lo vuelvo a intentar, a ver si doy con la correcta. Besitos!!!
ResponderEliminar¡Qué rica la tarta!, y que bonito todo lo que has contado acerca de ella, ¡ me ha encantado!. Un besin
ResponderEliminarIsabel que agradable es recordar a los seres queridos en los detalles, como tú con esta tarta.
ResponderEliminarEs una tarba bien distinta a los bizcochos de zanahorias que solemos ver. Me ha paredido exquisita y jugosa. Yo seré una de las que la prepare, sin duda. Ya he guardado la receta.
Mil besitos guapa,
Tienes razón, una persona vive mientras quede quien le recuerde.
ResponderEliminarPensaba que sería una tarta complicada, pero veo que no y queda monísima con las zanahorias de mazapán.
Besos.
los platos con buenos recuerdos son los mejores, sin duda..!!
ResponderEliminarLa tarta de zanahoria y coco era mi favorita de pequeño, aún hoy me gusta mucho....Asi que seguro que me acordare de tu abuelo cuando copie esta version vuestra...
El detalle de la zanahoria de mazapán, precioso!!!
bss!!
:-) bellissima, e bellissime anche le carotine che hai usato per decorare!
ResponderEliminarQué contento se habrá puesto tu papi!
ResponderEliminarMe ha encantado como la has adornado; la próxima vez yo también haré zanahorias de mazapán...
Me moría de ganas por ver vuestra versión de la tarta de zanahoria, tarta de la que yo creo que hay una versión en cada casa al igual que de la tortilla de patata...
Coincido totalmente en los sentimientos que expresas y la frase de que nadie muere mientras perdure en nuestro corazón me encanta y la escribo muchas veces en las tarjetas de pésame...
Un besazo guapa
La tarta seguro que está buenísima (probaré a hacerla) aunque esta vez la bella evocación que haces a tu abuelo me ha emocionado de verdad, quizá reflejo de lo que experimentamos por todos aquellos que ya no están entre nosotros pero que los sentimos ahí, siempre cerca, siempre con nosotros. Besos, Marisu (seguro que Mar piensa igual).
ResponderEliminarUnas palabras preciosas un recuerdo magnifico y una tarta de lujo eres un genio!! enhorabuena!!
ResponderEliminarbesos guapa
Lo mejor de esta tarta es su historia.....y que en ella se reflejan nuestros recuerdos y nuestro amor por nuestros antepasados.....hermosa y deliciosa!!.......Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarUna tarta con sabor a recuerdos que te ha quedado mas que perfecta Isabel. El detalle de las zanahorias de mazapán un puntazo.
ResponderEliminarUn merecido homenaje para un hombre que no dudo sería estupendo, para muestra un botón, y tu eres una digna heredera de su buen hacer ;)
Yo también se la suelo preparar a mi suegro sustituyendo la zanahoria por calabaza .
Jaja qué stres ayer, ahora me rio, pero me subia por las paredes .... . Para compensarte ya he puesto en mi receta que si el pollo fuera para ti le quitariamos la hoja de laurel , lo viste? jaja....
Mil gracias por todo .
Besinos mil.
Un pastel super original, y seguro que muy rico.
ResponderEliminarSaludos
La historia tan bonita hace que la tarta sea tierna y debe estar deliciosa......
ResponderEliminarQue bonito pensar que haces llegar la memoria de tu abuelo a tantos rincones!!!!
abrazos
dolores
Qué historia tan bonita!! Me ha recordado a la tarta que hacía mi abuela Carmen, era muy sencilla pero rica!! Gracias por compartirla!!
ResponderEliminarbessissssss
Isabel reina, me has dejado atónita, que tarta mas curiosa y las zanahorias que graciosas te han quedado, besos wapa.
ResponderEliminarque buena receta, te ha quedado de lujo, besos
ResponderEliminarMuy rica la tarta y muy buen post, me ha gustado mucho, me llevo un trocito, gracias por compartirla.
ResponderEliminarUn beso.
Claudia
Preciosa wapa ,me encantan las zanahorias de mazapan te han quedado monisimaaaaaas.
ResponderEliminarDoy fe de que esta de muete lenta tambien la hago pero en vez de los bollos le pongo bizcoxo y esta rica igualmente.
Bicos mil wapa.
Una emotiva entrada y una deliciosa tarta, muy bonita con las zanahorias de mazapán.
ResponderEliminarMe llevo la receta y cuando la haga pensaré en ti y en tu abuelo.
Buen lunes
Este tipo de recetas que te hacen sentir la infancia o a alguien especial cerca son siempre una pasada y les guardamos un rinconcito especial.
ResponderEliminarTe ha quedado genial,las zanahorias una chulada.
ResponderEliminarBeoss
¡¡Espectacular!!
ResponderEliminarpreciosas palabras, y totalmente ciertas, cuantos recuerdos vienen de un sabor, de un olor...si la preparo me acordaré de ti y de tu abuelo, me parece algo muy bonito :)
ResponderEliminarPor cierto, hoy comimos la pasta según tu receta del otro día con pollo y esparragos, estaba buenísima! besotes.
Una tarta muy especial,llena de recuerdos y historia...me ha gustado mucho,se ve muy jugosa.....las zanahorias de mazapan estan chulisimas.
ResponderEliminarBesets.
Pero qué monada de zanahorias Isabel!!!. la tarta me ha encantado y más con esa historia que tiene. es que cuando es así todo está mucho más rico verdad?. te ha quedado preciosa!!. besos.
ResponderEliminarCon una tarta como esta los buenos recuerdos siempre estaran presentes.
ResponderEliminarPreciosa la tarta y bonito homenaje a los que ya no están...me han encantado las zanahorias ^^
ResponderEliminarbesotess!! feliz semana ;))
Que bonita la entrada que has hecho hoy, me ha gustado mucho lo que has escrito, la tarta te ha quedado deliciosa y preciosa porque la has hecho con tanto cariño que no te podía quedar mal, se ve riquísima, me llevo prestada tu receta porque seguro que es una auténtica delicia.
ResponderEliminarBesos,
Nasy
Una tarta exquisita, que seguro que de algún modo, con el cariño que le has puesto, toda esa energía positiva y sentimiento le habrán llegado a tu abuelo, allá donde se encuentre (seguro que cerca de tí). La zanahorias además, son de lo más artístico ¡qué paciencia! :-)
ResponderEliminarUn besín.
Una tarta muy bonita y una historia preciosa, así es como tenemos que recordar a nuestros seres queridos.
ResponderEliminarEl detallito de las zanahorias de mazapán es un encanto.
Un beso.
Me quedo la receta, se ve tan rica y fácil, además con el cariño con que la has hecho!
ResponderEliminarBesitos
Que delicia de tarta,no la conocía pero siendo de tu abuelo,debe ser muy especial, a ti te ha quedado preciosa,bonita y una cucada.
ResponderEliminarMil besitos y gracias por tu comentario princesa.
Vaya una pinta que tiene la tarta del abuelo, no me extraña que sea su favorita con esos ingredientes que por cierto me ha llamado la atención lo de los 15 suizos. Un besazo.
ResponderEliminarEstas recetas con historia son las mejores.
ResponderEliminarAdemás me parece muy fácil, y debe estar riquísima, y muy bonita con las zanahorias de mazapán.
Un abrazo.
Esta tarta es la especialidad de mi cuñada Viri, mira que está buena,y además siendo la preferida de tu abuelo fijate que de recuerdos y connotaciones buenas unidas a una tarta tan rica.
ResponderEliminarUn besazo!
Qué post tan bonito sobre o teu abuelo, me fez recordar tambien momentos de criança...te ha quedado estupenda, la combinacion zanahoria e coco hummmm....deliciosa!
ResponderEliminarBesitos.
Interesante propuesta la tartita de zanahorias y para la vista genial!jejeje
ResponderEliminarBueno Isabel! pásate por mi blog hay un premio para ti.
Un beso!!
Pues yo también me he enamorado de esta tarta!! QUe rico que tiene que estar!! mmm
ResponderEliminarBesicos
Que recuerdos me trae esta tarta....la hacía mi madre cuando yo era pequeña y no la he vuelto a comer!!
ResponderEliminarTe quedo fantástica !!
Un beso guapa y gracias por recordarmela,a lgún día igual me animo.
Preciosa historia la de esta tarta que será una de las personas que la haga no tardando mucho.
ResponderEliminarBesotes
Hola, Isa!!
ResponderEliminarQué tarta tan original hacía tu abuelo, vaya combinación, me ha dejado pensativa. Seguro que estaba deliciosa y con esas zanahorias de mazapan, buenísima.
un besazo
Mi madre también hace una de zanahoria y coco que esta buenisima. Un día me animaré con ella. Te quedo buena, buena Isabel.
ResponderEliminarBesos
Isabel que rica, ¡¡¡¡¡¡¡ummmmmmmmmmm!!!!!!!! se ve exquisita, a mi me gusta mucho las tartas con con zanahorias. Besos.
ResponderEliminarQué rica receta, son de esas recetas que se disfrutan por el sabor y el recuerdo ;)
ResponderEliminarQué lindas las zanahorias :)
Saludos
acabo de descubrir tu blog y esta tarta tiene una pinta buenisima, la zanahoria de mazapan te ha quedadoo genial. me quedo de seguidora, pasate cuando quieras a visitar mi blog. Un beso.
ResponderEliminarhttp://hoycomiditarica.blogspot.com
Isabel, la receta es lo menos importante en esta entrada, para mi los mas bonito es el recuerdo a los que no están. La semana pasada hizo un año del fallecimiento de mi padre y tu entrada me llego dentro, muy dentro. Cada comida que hacemos o comemos siempre nos trae un recuerdo. Espero que disfrutaseis de la tarta y de la compañía de tu padre.
ResponderEliminarBesos
Me gustan mucho estas recetas, son sencillas, de casa, de siempre. Con ingredientes fáciles de encontrar pero no por ello menos deliciosas.
ResponderEliminarUn beso
Me ha parecido una entrada entrañable, a veces hay personas que se especializan sólo en una cosa pero claro, la bordan. Que sepas que pienso hacerla, me ha parecido fácil y buenísima y por supuesto recordaré a tu abuelo, aunque estoy segura que él no modelaba mazapan con tinte para formar las zanahorias!
ResponderEliminarUn besote.
Hola Isabel, la receta no tiene desperdicio, merece la pena hacerla, desde luego, te aseguro que la copio y la guardo para hacerla en cuanto pueda.
ResponderEliminarBesos
Qué bonito este post, me ha gustado mucho. La tarta seguro que está riquísima. Besicos guapi!
ResponderEliminarAys, Isabel, qué entrañable te nos has puesto, pero claro, el motivo no era para menos. Parece que cuando hablamos de nuestros seres queridos, pero especialmente de los que no están, se nos acelera el corazón. Me llama mucho la atención una cosa: y es que tu abuelo, antaño, entrara en la cocina, cuando los estereotipos mandaban y cada cual, hombre o mujer, tenía su puesto en casa.
ResponderEliminarLa receta me parece fabulosa, y no lo digo porque sí, si no porque yo la he comido, y no la de tu abuelo, sino que mi madre la tiene en un libro de repostería en su casa, y una amiga la hizo para un concurso en el instituto; así que ya tiene años el libro. La próxima vez que vaya a casa de mis padres, buscaré el libro, sin duda.
Un besito.
Entrañables recuerdos,la tarta estupenda,jugosa y fácil!,me la quedo.
ResponderEliminarBesos.
Qué pinta más estupenda tiene esta tarta Isabel, parece muy jugosita. Las zanahorias han quedado perfectas.
ResponderEliminarBesos.
Nieves.
Te ha quedado fantástica, he probado la coca de zanahoria, pero esta tarta tiene que estar deliciosa y el detalle de las zanahoria, te han quedado preciosas.
ResponderEliminarMe ha encantado, muchas gracias por compartir esta suculenta receta, Isabel.
Un abrazo.
Y bien bonito que es que una receta nos una de corazón, por mucho tiempo Isabel, aún cuando ya no estén, siguen. Tu tarta es una muestra de ello...y tu Abuelo vive en tí. Me gusta por eso mucho más esta receta, además de rica, de bonita que te ha quedado...por el amor que tiene paso a paso y seguirá teniendo en tu familia y en la de nosotros que te leemos por mucho tiempo :)
ResponderEliminarUn abrazo grandote y bonita semana.
Una tarta diferente de zanahoria muy original con los bollos suizos y muy rica, las recetas que hacían nuestros antepasados hay qeu recordarlas y hacerlas para qeu no se olviden aunque solo sea en su memoria, como lo tradicional no hay nada.
ResponderEliminarbesos guapaaa
Me encanta como le das ese toque final... jejeje. Tarta del abuelo, lujo repleto de vitamina C. Un beso. Monty
ResponderEliminarNo debería perderse la tradición de pasar las recetas de generación en generación. Me parece algo maravilloso! Te ha quedado genial y las fotos son preciosas como siempre! Un besin;)
ResponderEliminarUNa receta con historia personal, me gusta!!!! Y las zanahorias de mazapán una monada!!!
ResponderEliminarQuerida Isabel, Me has emocionado con los recuerdos de tu abuelo, es tan cierto que ellos no se van si uno los está recordando en las cosas lindas que nos enseñaron. La tarta está de lujo y no dejaré de hacerla. El domingo hice el pan de toffee y fue todo un éxito, gracias y muchos besos
ResponderEliminarSeguro que a tu padre le encantó tu regalo, una entrada preciosa...
ResponderEliminarHe visto tarta de zanahorias por distintos blogs y es que no sé puedo imaginarme su sabor!
Un besote!
Hola guapetona,
ResponderEliminartengo esta tarta en pendientes desde hace mil.
Está buenísima ¿verdad?
Yo la hago con bases de bizcocho compradas ;)
Un beso.
que tarta más bonita !!!
ResponderEliminarque tarta más rica !!!
que tarta más nostálgica !!!
Cris (La cocina de las Pinuinas)
Me encanta esa tarta, la preparé hace poco, pero con planchas de bizcochos, yo no la conocía, en mi casa, no han sido cocineros ni pasteleros, tan solo me gusta a mi meterme en estos berenjenales, jejeje.
ResponderEliminarYa he encontrado la receta de la que me hablabas. TE ha quedado mil veces mejor que a mi, qué presencia más bonita. Y lo rica que está ... por Dios.
ResponderEliminarBesos