helado de café de viena

El café vienés, llamado en italiano spresso con panna, es un café expreso pequeño o doble, generalmente ligero, cubierto con crema batida y que generalmente se sirve en demitasse (vaso pequeño o media taza).
Tan antiguo como el cappuccino y muy habitual en los cafés de Budapest y Viena.
Puede ser espolvoreado con una ligerísima capa de polvo de chocolate.
Para este helado he hecho una pequeña trampa utilizando unos sobres de café ya preparados, en caso de no disponer de ellos, utilizar cuatro cucharadas de café soluble.

Para su elaboración necesitamos,

- Un sobre de café vienés o cuatro cucharadas de café soluble.
- 200 gr de nata con al menos 35% materia grasa.
- 300 gr de leche.
- 150 gr de azúcar.
- 3 yemas de huevo.
- 2 cucharadas de azúcar invertido.
- Nata semimontada.
- Cacao en polvo para espolvorear.

Ponemos en un cazo la leche, nata y azúcar. Calentar sin dejar que hierva.

Incorporar el café y remover.

Añadir las yemas batidas moviendo sin parar y dejar al fuego hasta el momento anterior al hervor.

Fuera del fuego, añadir el azúcar invertido y mezclar bien.

Nos quedará con una textura de crema fina que debemos refrigerar al menos cuatro horas, lo ideal es dejarlo al frío toda la noche.

Transcurrido el tiempo verter en la heladera y dejar mantecar durante 45 mn. En caso de no disponer de heladera, introducir en un recipiente apto para congelación y remover con un tenedor cada hora al menos cuatro veces.

Tras el mantecado llevarlo al congelador hasta la hora de consumir. Servir con crema semi batida y espolvorear con cacao en polvo.